El gabinete libanés tiene programada una serie de sesiones en las cuales la oposición encabezada por los ministros de Hezbollah y sus aliados impulsarán la controvertida cuestión de "testigos falsos" a través de un voto. Un voto en el Consejo de Ministros, o la falta de ellos, podría sumir al país en su peor crisis política desde mayo de 2008 y poner en peligro al gobierno de unidad nacional.
Hezbollah – tiene 2 ministros en el gabinete - como miembro de la Coalición 08 de Marzo, espera remitir la cuestión de los testigos que dieron declaraciones falsas a la investigación internacional sobre el asesinato en 2005 del ex primer ministro Hariri, al Consejo en un intento por finalizar con el Tribunal Especial para el Líbano (TEL). Si la votación resultase favorable al 08 de Marzo se debilitaría a Hariri; mientras que si la sesión termina sin la resolución de la cuestión esto molestaría al 8 de marzo y podría conducir a una escalada en la retórica y se profundizaría la crisis política.
Los ministros de la Coalición 08 de marzo, celebraron una reunión en el Parlamento para coordinar posturas antes de la sesión. Asistieron a la reunión por el diputado Ali Hassan Khalil y Khalil Hussein, y los asesores políticos de Nabih Berri, y el Secretario General de Hezbollah Sayyed Hassan Nasrallah.
El Primer Ministro Saad Hariri y sus aliados quieren evitar una votación y han pedido que la cuestión se refiera al poder judicial; Hezbollah teme que en la acusación se involucre a algunos de sus miembros. El bloque del Movimiento del Futuro, liderado por Hariri, mantuvo una reunión presidida por el ex primer ministro libanés, Fouad Siniora, al finalizar la misma se emitió una declaración donde se reiteró que la cuestión de "testigos falsos" sólo puede resolverse por el poder judicial.
El Presidente Michel Sleiman – tiene 5 ministros de 30 - también quiere evitar una votación en la sesión y podría levantar la sesión si los rivales no llegan a un consenso sobre el asunto, que encabeza la agenda del Consejo de Ministros.
Michel Aoun, líder del Movimiento Patriótico Libre, favorecería el recambio del gobierno si no se aborda la cuestión de los testigos falsos. Por su parte, el Patriarca cristiano maronita, Nasrallah Butros Sfeir, señaló que la formación de un nuevo gabinete podría ser la solución para el callejón sin salida actual, pero que Hariri era el hombre adecuado para liderar un nuevo gobierno.
Walid Jumblatt, viajó a Damasco, donde el martes se reunió un ayudante del presidente sirio Bashar Assad. Se estima que Jumblatt estaría tratando de llegar a un acuerdo sobre el asunto; aunque fuentes del 08 de marzo señalaron que la Coalición confía en que los tres miembros de Jumblatt en el gabinete, apoyen la moción de referir a los "testigos falsos" al Consejo.
Michel Aoun, líder del Movimiento Patriótico Libre, favorecería el recambio del gobierno si no se aborda la cuestión de los testigos falsos. Por su parte, el Patriarca cristiano maronita, Nasrallah Butros Sfeir, señaló que la formación de un nuevo gabinete podría ser la solución para el callejón sin salida actual, pero que Hariri era el hombre adecuado para liderar un nuevo gobierno.
Walid Jumblatt, viajó a Damasco, donde el martes se reunió un ayudante del presidente sirio Bashar Assad. Se estima que Jumblatt estaría tratando de llegar a un acuerdo sobre el asunto; aunque fuentes del 08 de marzo señalaron que la Coalición confía en que los tres miembros de Jumblatt en el gabinete, apoyen la moción de referir a los "testigos falsos" al Consejo.
Estas sesiones del Consejo se van a llevar adelante luego de la gira de Hariri por el Reino Unido, la visita a Beirut del Canciller de Francia y del senador norteamericano John Kerry, Presidente de la Comisión de Relaciones Internacionales del Congreso. Hariri ha logrado un fuerte apoyo internacional y ha consolidado una red de intermediarios en la región que tienen capacidad de intervenir ante una parálisis política de Líbano.
La oposición, formada por Hezbollah entre otros, ha realizado importantes esfuerzos por bloquear el accionar del Tribunal que podría acusar a miembros de la milicia islámica; hasta el momento la Coalición encabezada por Hariri ha salido airosa de estos embates pero cada uno de ellos va debilitando la base de poder estatal del gobierno y de allí su necesidad de buscar apoyo internacional. Hariri no ignora que deberá mantener el Tribunal ya que si lo disuelve – aunque legalmente no pueda – significaría el final para su gobierno.
No hay comentarios:
Publicar un comentario