martes, 14 de junio de 2011

Líbano y los desafiío del nuevo gobierno


Teherán, el principal apoyo de Hezbollah que domina el nuevo gobierno con sus aliados, felicitó al Primer Ministro libanés, Najib Mikati, por su nuevo gobierno en el que Hezbollah y sus aliados tienen la mayoría; en una conversación telefónica, el primer vicepresidente, Mohammad Reza Rahimi felicitó Mikati y el pueblo libanés en la formación del nuevo gobierno y reiteró los deseos de Iran de seguir siendo un socio para el Líbano.

El ministerio francés de Asuntos Exteriores instó hoy a nuevo gobierno del Líbano a cumplir sus compromisos internacionales, incluyendo el respaldo un tribunal encargado de investigar el asesinato del ex primer ministro Rafiq Hariri. La cancillería francesa dijo en un comunicado que la formación del gobierno libanés es un paso importante para el Líbano y los libaneses; señaló además lo esencial que es para el gobierno el cumplimiento de las obligaciones internacionales del Líbano y los compromisos.

Mark Toner, portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos, dijo se iba a juzgar al nuevo gobierno "por sus acciones", siendo lo más importante que el nuevo gobierno libanés permanezca junto a la Constitución libanesa, que renuncie a la violencia, incluidos los esfuerzos de represalia en contra de ex funcionarios del gobierno, y haga honor a sus obligaciones internacionales en alusión al Tribunal Especial.

La Presidente del Comité de Asuntos Exteriores, Ileana Ros-Lehtinen (R), pidió un corte de todas las ayudas de EE.UU. al nuevo gobierno de Líbano, siempre y cuando cualquier grupo de extremistas violentos designado por los EE.UU. como organizaciones terroristas extranjeras, participan en él.

Mikati también recibió al Embajador de Francia en el LíbanoE, Denis Pietton, y al Coordinador Especial para el Líbano, Michael Williams. Haciéndose eco de los pedidos de EE.UU., Williams expresó su esperanza de que el nuevo gobierno que cumpla con las obligaciones internacionales.

El presidente sirio, Bashar Al-Assad, felicitó a Líbano por la formación del nuevo Gabinete -mediante una llamada telefónica- y al presidente Michel Sleiman por tal hecho. Al-Assad también felicitó a Nabih Berri, por "el paso importante que dio lugar a la formación del gobierno".

No hubo comentarios inmediatos de Arabia Saudita o Qatar, dos mediadores claves en la anterior crisis política de Líbano, pero el embajador saudí en Líbano, Alí Al-Awad Osseiri visitó a Mikati para felicitarlo.

Mikati ha tratado de calmar los temores acerca del nuevo gabinete, diciendo que "el hecho de que Hezbollah y sus aliados tengan 18 asientos en un gabinete de 30 miembros no significa que el país se unirá a los radicales en cuanto a sus relaciones con la comunidad internacional además de los 12 de los ministros habían sido nombrados por él mismo, el presidente Sleiman y el druso Jumblatt asegura que Hezbollah y sus aliados no podrían tomar decisiones unilateralmente.

La primera prueba para el gabinete de Mikati proviene de la opositora Coalición 14 de Marzo que comenzó con las acusaciones e hizo público su malestar por la conformación del nuevo gabinete y en especial, por el nuevo escenario político con un fuerte dominio de Hezbollah; situación que llevó a calificar a Líbano como "rehén" de Siria y Hezbollah tras la formación del gabinete. Fares Soueid, secretario del 14 de Marzo, dijo que la oposición emitiría un comunicado de prensa esta semana donde se indicará su posición contra el gabinete de Najib Mikati.

La otra prueba inmediata para el nuevo Primer Ministro será cómo manejará la relación de su país con el Tribunal Especial, ya que se esperan acusaciones contra los miembros de Siria e Irán y posiblemente de Hezbollah, sus principales aliados en el nuevo gabinete. Mikati fue nombrado Primer Ministro con la anuencia de Hezbollah, aunque ha tratado de mostrarse como un político independiente y de conciliación tendrá que confrontar con la presión de la milicia islámica en algún momento o encerrarse en un enfrentamiento con la comunidad internacional sobre el tema.

Con el temor permanente en el Líbano de un enfrentamiento sectario, el escenario podría recalentarse si Hezbollah es acusado del asesinato de Hariri; también podría suceder lo mismo si la resistencia chiita evita al Tribunal. En algún punto la situación será delicada por las acusaciones cruzadas -entre las facciones religiosas- o cuando el mismo Tribunal emita una al respecto.

Por otro lado desde Hezbollah se ve con cierta preocupación a las manifestaciones en Siria y la posibilidad de que el régimen de Al-Assad caiga -un aliado histórico del partido- lo que explicaría la necesidad de Hezbollah por consolidar rápidamente su poder político interno frente a la eventualidad de quedar aislados.

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